La metodología del IB es rigurosa y equilibrada, y constituye una excelente preparación para la vida universitaria y adulta. Aborda cuatro dimensiones humanas: intelectual, social, emocional y física de los alumnos durante dos años académicos.
Se caracteriza por la profundización en varias áreas del conocimiento y la variedad en los enfoques de los estilos de enseñanza y aprendizaje: Los estudiantes no sólo escriben sino que investigan, hacen presentaciones orales, trabajan en grupos, hacen portafolios, proyectos, exámenes, entre otros.
Por otro lado, la evaluación comprende una parte interna, administrada y corregida por los docentes del colegio siguiendo los criterios internacionales del IB, y una segunda parte externa, administrada en el colegio pero corregida por examinadores externos.